Dispone de una tapa con un asa cómoda, lo que permite al niño cogerla facilmente.
El clic característico es una señal de que la taza está bien cerrada y que el niño puede sostenerla con seguridad. El cierre es lo suficientemente fuerte como para permitir que el niño sostenga la taza de forma segura incluso mientras se mueve.
La pajita y la boquilla fueron especialmente diseñadas para desmontar y limpiar fácilmente.
Hecha de silicona suave y de alta calidad que no irrita las encías y es químicamente inerte. Su longitud se ajusta para que el líquido permanezca fuera del área de los dientes del niño.
Un botón especialmente diseñado protege contra la apertura accidental y el derrame de las bebidas.
Se puede usar tanto con la taza 360 °como con la taza antiderrame LOVI.
Contiene:
Taza con pajita, que permite la independencia y la comodidad del niño. Especialmente diseñada para permitir que el niño beba libremente. El sistema de sellado permite que no caiga ningún líquido una vez que el niño cierra la taza, pudiendo moverse con la taza en la mano sin derrames.
Cuando un niño tiene entre 10 y 12 meses, vale la pena alejarse de la succión como la forma principal de beber alimentos. Es hora de añadir una taza con pajita. Beber de la pajita favorece el desarrollo de la boca, el sistema respiratorio y el aparato vocal.
¿Como funciona?
- Si la bebida es adecuada, ambos labios, mejillas y otras partes de la cara participan activamente en la distribución del líquido y sujetan firmemente el borde del vaso o la pajita. Esto evita problemas con el desarrollo anormal de dientes y oclusiones a una edad avanzada
- Beber de una taza con pajita da forma a la duración de las fases de inspiración y exhalación, que es un elemento de desarrollo y es necesario durante la conversación. Esto desarrolla la capacidad de controlar el flujo de aire durante estas fases y todas las mecánicas de respiración.
- Estimula los buenos hábitos de comer, beber y hablar.